Beneficios del descanso activo para quienes hacen ejercicio
- El Cuartel Web
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¿Descansar sin moverse es la mejor opción? Cuando entrenas regularmente entre cinco y seis días seguidos, es común dedicar los días restantes al reposo absoluto, sin ningún tipo de actividad física. Sin embargo, pasar todo el día inactivo puede no ser la mejor estrategia para una recuperación óptima. El descanso activo propone movimientos suaves que ayudan a tu cuerpo a reponerse sin perder el ritmo.
¿Qué es el descanso activo y cómo funciona?
El descanso activo consiste en realizar actividades físicas de baja intensidad en los días de recuperación. Estas acciones mantienen el cuerpo en movimiento sin exigirle esfuerzos significativos, lo que favorece la circulación sanguínea y reduce la rigidez muscular.
A diferencia del reposo total, este método no interrumpe por completo la actividad física, sino que la adapta para que los músculos se repongan de manera más eficiente.
Actividades recomendadas para un descanso activo efectivo
Caminar a ritmo tranquilo: Entre 20 y 30 minutos de caminata ligera estimulan el flujo sanguíneo sin fatigar el cuerpo.
Estiramientos y yoga suave: Mejoran la flexibilidad y alivian la tensión muscular sin forzar las articulaciones.
Natación o ciclismo recreativo: Son ejercicios de bajo impacto que permiten mover el cuerpo sin generar estrés adicional.
Ejercicios de movilidad articular: Rotaciones controladas de hombros, rodillas y tobillos ayudan a mantener la amplitud de movimiento.
Beneficios de incluir descanso activo en tu rutina
Recuperación más rápida: Al promover la circulación, los músculos reciben más nutrientes y oxígeno, lo que acelera su reparación.
Menor rigidez y dolor muscular: El movimiento suave evita que los músculos se tensen después de un entrenamiento intenso.
Mejor estado de ánimo: Mantener cierta actividad física evita la sensación de pesadez y mejora el bienestar mental.
Prevención de lesiones: Reduce el riesgo de sobrecargas al equilibrar el esfuerzo con una recuperación adecuada.
¿Cuándo es mejor optar por reposo total?
Aunque el descanso activo es beneficioso en la mayoría de los casos, hay situaciones en las que el reposo absoluto es necesario. Si experimentas dolor agudo, inflamación o agotamiento extremo, lo más aconsejable es detener toda actividad física hasta que el cuerpo se recupere por completo.
La efectividad del descanso activo depende de adaptar la intensidad a tus sensaciones corporales. Si aparecen molestias persistentes, es señal para reducir el ritmo o cambiar de actividad.